Recuerdo los primeros años de carrera, cuando iba a clase y disfrutaba escuchando las historias de los profesores, de sus experiencias y vivencias como profesionales. Me encantaba escucharlas y pensar en qué me encontraría yo cuando terminase la carrera y me enfrentase de verdad a todo aquello que estaba estudiando.
Un evento que todos esperábamos eran las Jornadas de Psicología. Una iniciativa de aplaudir que cada año la Junta de Psicología prepara con cariño, dedicación y desinterés para que los alumnos viviésemos (y vivan) una semana llena de testimonios, experiencias y talleres con profesionales de diversos ámbitos de la psicología.
Todavía no puedo creer que este año, en la XXIII edición de estas maravillosas jornadas yo vaya a ser una de las ponentes. De todas las charlas que haya podido dar esta es, sin duda, la que más ilusión me hace y la que más respeto me da. Solamente espero estar a la altura de todo lo que yo he podido escuchar en ese salón de actos.
El tema que he escogido es el de la cultura corporativa, el dar alma a tu empresa, y la importancia de cuidar y mimar esa cultura. Como no, hablaré de mi adoradísimo trabajo en habitissimo, el lugar donde desarrollo mi profesión y que es mi mayor hobbie (mi trabajo). En el taller hablaremos sobre la importancia de las sesiones de creatividad y practicaremos una de estas sesiones.
No puedo esperar a volver a la que considero mi casa, la Facultad de Psicología de la UIB, a encontrarme con mis antiguos profesores (y algunos de ellos ya amigos), a volver a respirar ese ambiente, a tomarme el zumo del descanso y a volver a ver caras de personas llenas de ilusión por iniciar su camino en una profesión apasionante.
¡Gracias chicos, nos vemos pronto!